La Fibrosis Quística también puede afectar el sistema digestivo. En el reflujo gastroesofágico el contenido del estómago regresa hacia el esófago causando irritación.

Esto puede presentarse en personas con FQ, especialmente en adultos. Los síntomas son acidez, dolor en el pecho, náuseas o sabor amargo.

Comer porciones más pequeñas, evitar ingerir alimentos antes de acostarse y reducir el consumo de bebidas carbonatadas puede ayudar a reducir los síntomas.

Recuerda que cada caso es diferente por lo que es recomendable consultar con un profesional de la salud para lograr un manejo adecuado.