El trasplante pulmonar es una opción para muchas personas con Fibrosis Quística.
En 1983, un equipo de cirujanos del Hospital de la Universidad Presbyterian en Pittsburgh fueron los primeros en realizar este tipo de procedimiento en un paciente FQ.
Desde entonces se han logrado grandes avances para que más personas puedan tener acceso a esta alternativa.
Es importante aclarar que no todas las personas con FQ van a necesitar un trasplante, cada caso es diferente y debe ser evaluado por un equipo interdisciplinario para determinar las mejores opciones de manejo.